Nos vamos al Valle de Arán y al Parque Nacional de Aigües Tortes y los Lagos de San Mauricio. Sus
nombres ya nos hablan de Pirineos en estado puro. El Valle de Arán está bañado por las aguas del
Garona, único río que naciendo en esta zona de Pirineos no vierte sus aguas en el Mediterráneo, sino que
desemboca en el Atlántico. De ahí la propia particularidad geopolítica del valle, que, perteneciendo a
España, se encuentra orientado en el lado norte de la cadena, esto es, mirando a Francia. Era Val
d´Aran, escrito en lengua aranesa, se encuentra situado en los Pirineos centrales. Tiene una marcada
climatología atlántica, con abundantes precipitaciones durante una buena parte del año, lo que propicia
la gran cantidad de ríos, arroyos y lagos que se encuentran en el territorio. Los bosques, de hayas, de
abetos, de pinos, pueblan las laderas medias y los verdes pastizales salpicados de flores los grandes
puertos que encierran el valle, como el famoso de la Bonaigua. El Parque Nacional de Aigües Tortes y
Lagos de San Mauricio, otra de las joyas, de nuestro viaje fue creado en 1955 y es el único Parque
Nacional en Cataluña. Un conjunto de más de 200 lagos glaciares, esbeltos picachos de granito y
bosques de pino rojo y negro, además de numerosa fauna, hacen de Aigües Tortes todo un paraíso por
donde podremos caminar. Este fantástico ambiente de montaña pirenaica junto al legado histórico dela
zona, con un exquisito patrimonio cultural, hacen las delicias del visitante. Todo ello, unido a una gran
red de senderos nos propiciarán adentrarnos en sus rincones más secretos. Durante estos días
tomaremos como base un buen y bonito hotel situado en Vielha, la pequeña capital del valle, para, tras
las actividades poder disfrutar del magnífico ambiente de la zona. Un viaje al frescor del Pirineo, una ruta
para relajarnos de tantos meses de “encerramientos”. Te esperamos.